4,6/5

Novela de calidad, extremadamente singular que mezcla el realismo y la ciencia ficción y que acomete temas muy potentes ... pero también tramposa. Y es que la novela viene con McGuffin. Por lo tanto es importante recalcar que no es una novela de ciencia ficción al uso, aunque se presente como tal. Es una novela realista que trata con profundidad y se aproxima a temas como la depresión, el suicidio adolescente, el abandono o la sexualidad (gay). De forma secundaria también aborda el Alzheimer. las relaciones tóxicas, la culpa, el duelo, los maltratos, la familia, la paternidad, las familias monoparentales, la criminalidad juvenil, el consentimiento, el bullying, etc. De hecho uno de los pocos defectos que se le puede recriminar, es la cantidad de temas que trata, que puede llegar a agobiar. Como dice el refrán: "Quien mucho abarca, poco aprieta" y si bien es cierto que el objetivo de la novela no es tocar todos estos temas, la cantidad e intensidad  de estos, puede agobiar a más de un lector. Hay que recalcar que los trata con una sensibilidad especial, de forma muy respetuosa y desdramatizando a través del humor.

En cuanto a los pilares básicos de una novela, saca buena nota en todos: tiene una buena premisa -aunque tramposa es muy buena-, un ritmo bien logrado y unos personajes excelentemente desarrollados al igual que la atmósfera. Se le puede recriminar el síndrome del "Final de Perdidos" ya que éste no consigue estar a la altura ni del climax, ni de las expectativas generadas. Sin embargo no es un mal final. Otro punto interesante es el formato, en que alterna capítulos en forma de diario (realismo) con otros que narran las diferentes formas en las que el mundo desaparece (ciencia ficción). 

• Pros: premisa muy original, atrapa, personajes muy bien trabajados, temas muy potentes, ...
• Contras: aborda numerosos temas y el final de la historia puede parecer un poco descafeinada. Puede asustar a personas sensibles a la palabra "polla" y homófobos